El mes de noviembre trae un aire de cambio y transformación, asociado con el número maestro 11, este mes despierta una energía intensa, reveladora y transformadora que afecta a nuestras relaciones personales.
No solo nos permite reflexionar sobre lo que queremos mantener en nuestra vida para el próximo año, o soltarlo para dejar espacio, también puede marcar reencuentros y nuevas oportunidades.
Así que si has estado pensando en un amor del pasado, es posible que puedas reencontrarte con él para darse una nueva oportunidad.
Te podría interesar: ¿Cansada de las malas rachas? Así puedes activar tu buena suerte de acuerdo a tu signo zodiacal
¿Qué significa la teoría de noviembre?
Esta teoría asegura que noviembre es el mes en el que el universo “pone a prueba” tus vínculos más cercanos, marcando un periodo de cierre energético, es decir, las personas comienzan a cuestionar lo que realmente quieren conservar y lo que deben soltar antes de iniciar el nuevo año.
Esta es la razón por la que muchas relaciones se enfrían, terminan o, en algunos casos, se reencuentran desde una nueva perspectiva.
Los astrólogos y expertos en energía lo asocian con el número 11, considerado un número maestro que simboliza la intuición, la evolución espiritual y la transformación.
La influencia energética del 11, nos impulsa a tomar decisiones desde la verdad interior, lo que puede traducirse en rupturas necesarias o reconciliaciones genuinas.
Sin embargo, en las relaciones de amistad o familiares, pueden ocurrir limpiezas energéticas, que se pueden traducir en lazos más fuertes o alejamientos que son necesarios para seguir creciendo.
Noviembre es un mes para reinventarte
Aunque muchos puedan ver estos movimientos energéticos como un periodo de caos emocional con resultados negativos, no es así, es un llamado a revisar más a fondo tus vínculos, desde el amor propio y la autenticidad, sin la influencia de las expectativas.
Es un momento para soltar lo falso, abrir nuevos espacios y prepararte para recibir lo que realmente mereces, no se trata solo de rupturas y reencuentros, sino de transformación y evolución personal.