Harry y Meghan: ¿por qué ya nadie quiere a los Sussex?

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Cuando la actriz y el príncipe de Inglaterra se casaron parecían una royal power couple, pero los conflictos con la familia real los dejaron fuera y envueltos en una dinámica destructiva. ¿Por qué ya nadie quiere a Harry y Meghan Markle?

¿El declive de los Sussex?

Se esperaba tanto de ellos que hasta duele ver cómo Meghan Markle y el príncipe Harry aún no encuentran su lugar en la escena internacional. Los duques de Sussex tenían todo para ser
una pareja poderosa con causa y voz propia, pero en el camino los perdimos.

Eran perfectos para representar los valores de las nuevas generaciones: formaban uno de los pocos matrimonios interraciales de la realeza, venían de mundos diferentes, se decían ecologistas y tenían cada uno un trabajo que les apasionaba (a ella la actuación y a él su carrera militar). Estaban en una posición privilegiada que les otorgaba un micrófono para hacerse escuchar en las causas benéficas que quisieran abrazar.

Lo tenían todo para brillar y transformar al mundo. Pero perdieron el piso.

Harry y Meghan: ¿racismo o un ego lastimado?

Meghan y Harry incluso rebasaron la popularidad de William y Kate, ahora príncipes de Gales, quienes debido a que William será algún día el futuro rey, deben seguir reglas más estrictas que los Sussex, una gran ventaja para Meghan y Harry, ya que podían tener una imagen más fresca y moderna.

Pero ellos no lo vieron así, de hecho iniciaron una rivalidad con los futuros rey y reina de Inglaterra: Meghan sintió que la trataban diferente, que a ella no le daban el foco ni los eventos importantes. Y es verdad, la casa real no le podía dar el mismo tratamiento a Meghan, pues no está casada con el futuro rey de los ingleses y Kate sí.

No fue racismo, fue el ego lastimado de Meghan, que no soportó ocupar una segunda posición dentro de la jerarquía de la monarquía inglesa. Si Harry se hubiera casado con otra joven, la que fuera, le habrían dado el mismo lugar que le fue otorgado a Meghan. De ahí que Markle convenciera a su esposo de ejecutar el famoso ‘Megxit’, que no fue otra cosa que planear su salida de la familia real y no sólo lo consiguió, sino que lo hicieron de la peor manera.

 

Harry y Meghan aspiraban a ser los nuevos Obama

La bandera que tomaron los Sussex para anunciar su separación definitiva de los Windsor era que anhelaban cambiar al mundo a través de un rol filantrópico que, según ellos, no podían tener si seguían formando parte de la familia de la reina Isabel II. Lo que no pensaron es que no había un mejor lugar para hacerlo que estar dentro de la monarquía.

Si no lo creen basta con voltear a ver el impecable trabajo humanitario que hizo Lady Di, madre de Harry. Diana aprovechó al máximo el foco mediático que le brindaba el hecho de ser la princesa de Gales y puso su granito de arena para hacer de este planeta un lugar mejor. Aquí puedes leer de las 5 formas en que la princesa Diana desafió a la reina Isabel II con su activismo.

De hecho, los duques de Sussex hasta contrataron a la experta en imagen Miranda Barbot, quien es considerada una gurú de la comunicación política. Ella fue la persona que hizo que Barack Obama ganara la reelección en 2013.

También crearon la Fundación Archewell, una organización global sin fines de lucro. “Cada uno de nosotros podemos cambiar nuestra comunidad. Todos podemos transformar al mundo”, reza una frase en su página web con una enorme foto de los Sussex. Ni su fundación ni su trabajo humanitario han trascendido en estos años, porque básicamente es nulo.

Pero también se han vendido como una pareja ambientalista que llegó a participar en algunos foros para concientizar al mundo sobre la contaminación en sus diferentes formas; sin embargo, los constantes vuelos en aviones privados que realizaron los Sussex a lo largo y ancho del mundo les valieron las críticas más duras. Y es que uno privado puede llegar a emitir hasta 3.3 millones de toneladas de CO2.

La falta de congruencia en los discursos de la pareja les ha restado credibilidad como personajes públicos, lo cual ha mermado su popularidad.

Los contratos millonarios de Harry y Meghan

Después de poner un pie fuera de Buckingham, Meghan y Harry pensaron que podían seguir conservando el mismo estilo de vida que tenían como integrantes de la casa real inglesa, no obstante, el príncipe Carlos dejó muy claro que les retiraría toda la ayuda económica e, incluso, el gobierno inglés se negó a conservar la seguridad personal de la pareja, ya que ésta era a cuenta
de los contribuyentes.

Harry no contempló que al separarse de su familia tenía que valerse por sí mismo, su único patrimonio era la herencia que le había dejado su madre, la princesa Diana, pero los 30 millones de dólares no le alcanzaban.

Así que él y Meghan cerraron jugosos contratos con empresas como Netflix, quien pagó a los duques 150 millones de dólares por una serie animada en la que Meghan trabajó durante casi un año y que al final la plataforma de streaming canceló, así como un documental de su vida que aún no se estrena.

 

Con Spotify firmaron otro contrato por 18 millones de dólares con el propósito de crear varios podcast. Uno de los programas es Archetypes, conducido por Meghan con el fin de concientizar sobre la situación de las mujeres a nivel mundial y donde tendría algunas invitadas. En el primer episodio, con Serena Williams, lo más trascendente fue una historia sobre Archie que estuvo
a punto de morir en un incendio en 2019.

El diario The Times criticó fuertemente el podcast de la duquesa de Sussex. “La primera vez que se dio cuenta que era fabulosa fue a lo 11 años. Y es justo cuando piensas: ‘Dios mío, esto nunca va a terminar’, Meghan elabora una alegoría de todas las maneras en que ella, una mujer feroz, fuerte y muy valiente, fue agraviada y difamada durante los 10 minutos que vivió en Reino Unido”.

Por su parte, el diario Daily Mail en una nota firmada por la periodista Meghan McCain, hija del político John McCain, se le fue a la yugular a la duquesa. “¿Realmente cree Spotify que el aburrido y engreído ejercicio de autoflagelación de Meghan Markle para mujeres ricas y con derechos vale el enorme precio que pagaron por él?”. Para McCain fue sorprendente cómo un podcast que prometía el empoderamiento de la mujer no hablaba de otra cosa más de lo maravillosa que es Meghan y una que otra anécdota de Archie.

Eso sí, digan lo que digan el podcast ocupa los primeros puestos a nivel mundial, pero a un precio muy grande: la credibilidad de la duquesa de Sussex. Son muy pocos los proyectos que la pareja anunció con bombo y platillo los que se han materializado y de los que sí han podido concretar, ninguno ha estado exento de fuertes críticas.

 

‘Nadie construye un camino destruyendo a otros’

Una de las causas que los orilló a renunciar a la Casa Windsor fue que los Sussex dijeron sentirse perseguidos por la prensa, de hecho en los juzgados ingleses ya son clientes frecuentes por la cantidad de demandas que han levantado contra varios medios.

Pero se fueron a vivir a Montecito, California, el paraíso de los paparazzi. También han alzado la voz para combatir la pobreza, pero su estilo de vida millonario resulta escandaloso, ya que, además, son pocas las donaciones que han realizado.

Esa incongruencia es lo que ha lastimado su credibilidad, sí, pero quizá lo que más indignación produce en el colectivo es su estrategia de victimizarse frente a la familia real, a la cual han acusado de maltrato y racismo. A partir de su entrevista con Oprah Winfrey en 2021 comenzaron una guerra contra la casa real y sus integrantes, entre los que están el príncipe Carlos.

Hoy pareciera que su único objetivo se ha centrado en destruir a la familia de la reina Isabel II, pues cada que tienen un micrófono hablan mal de ellos. Su discurso está lleno de odio para los Windsor. Pero los hechos, al final del día, son los que hablan de una persona y en estos dos años de independencia, sin trabajo humanitario, sin ejemplo de una concientización ambiental y mucho menos liderazgo, sólo ocupan su imagen para hacer negocios, aunque los resultados en su mayoría no sean del todo exitosos. ¿Cuánto tiempo más podrán sacar provecho de su imagen maltrecha?

Originalmente publicada el 01/12/2022

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