Si hay algo que caracteriza a la Familia Real Británica es su negativa a hablar sobre la vida privada de sus miembros, una regla que Kate Middleton ha seguido desde que se incorporó a la vida de la realeza.
Sin embargo, hay ocasiones en las que la prensa o algunos de sus seguidores han intentado obtener más información sobre los royals y su vida cuando tienen la oportunidad de interactuar con ellos en eventos oficiales. Y es ahí en donde, según nueva información, la princesa de Gales aplicaría un sutil truco para esquivar esas difíciles preguntas con elegancia, pero sin revelar nada.
¿Qué hace Kate Middleton para evitar responder preguntas sobre su vida privada?
El actor Rami Malek, conocido por su papel en la película Bohemian Rhapsody, compartió en el programa Jimmy Kimmel Live! una anécdota que dejó entrever la destreza de la esposa del príncipe William para desviar conversaciones que podrían rozar lo privado.
Fue durante una charla informal con la princesa en los BAFTA 2019, justo después del nacimiento del príncipe Louis, que el actor le ofreció a Kate, en tono de broma, cuidar de sus hijos si ella y William necesitaban un descanso. “Le dije: ‘Si necesitan un día libre, yo puedo hacer de niñero’”, recordó entre risas.
Kate, sorprendida, no respondió directamente, pero sí aplicó un sencillo truco de desviar la conversación hacia Malek y responder con una pregunta. “Ella dijo: '¿Cómo estás?’. (Y yo): ‘No, ¿cómo estás tú? Y me miró de la forma más regia y elegante”, relató el actor.
Si bien este gesto puede ser algo muy pequeño, en realidad es profundamente revelador. En ese cambio de foco, la princesa esquivó elegantemente la conversación sobre su vida familiar y dirigió la atención hacia su interlocutor.
Malek confesó que el momento lo tomó desprevenido, pero también le dejó una impresión duradera sobre el dominio emocional y profesional de la princesa. “Y con la mayor elegancia, me miró. Pero se nota. Imagínate, vas de gala, tienes que hablar con todos estos actores”, explicó el actor.
Este truco, tan sencillo como eficaz, habla de una estrategia que va más allá de la cortesía. Kate Middleton domina el arte de responder sin exponerse, de conectar sin perder el control de la narrativa. No es casualidad que tanto ella como el príncipe William compartan solo pequeños destellos de su vida privada, como cuando relatan anécdotas graciosas de sus hijos, pero nunca más de lo estrictamente necesario.
Así, en cada aparición pública, Kate no solo representa a la monarquía, sino que lo hace protegiendo con firmeza lo más sagrado para ella: su familia. Sin dramatismos, sin necesidad de explicaciones, con una sonrisa y una pregunta de regreso, la princesa de Gales demuestra que la elegancia también puede ser una forma de defensa.