Ya han pasado más de cuatro años desde aquel 8 de enero de 2020, cuando el príncipe Harry y Meghan Markle anunciaron su renuncia a sus deberes reales como miembros de alto rango de la Familia Real británica para pasar a vivir Estados Unidos, donde desde entonces residen. Aunque todo parecía marchar bien, ahora parece ser que el hijo menor de Carlos III está arrepentido de su decisión. Harry está cansado del “experimento de Meghan”, se afirma desde el Daily Mail.
En el citado medio, la experta Maureen Callahan desvela que el regreso del duque de Sussex a su tierra natal podría ser inminente, pues los pocos amigos que conserva viven ahí. Esto podría no importarle a Meghan, afirma la autora. Harry “no encaja en el mundo del espectáculo de Meghan”, afirma la articulista.
Callahan afirma que en ese mismo contexto de hartazgo, Netflix no tiene planes de renovar el acuerdo de 100 millones de dólares de la pareja, ya que el documental Invictus de Harry de 2023 resultó uno de los fracasos más grandes del año para la plataforma de streaming. Esto sería una razón más para que los Sussex considerarán abandonar su sueño de ser económicamente independientes en Estados Unidos.
“¿Qué otra vía de escape le queda a Harry —un hombre adulto cuyo único trabajo real ha sido el de miembro de la realeza— que buscar la reconciliación y alguna forma de retorno a su antigua vida ?”, sentenció la experta, explicando posteriormente en su escrito cuáles serían las consecuencias del retorno del benjamín.
¿Qué pasaría si el príncipe Harry decide volver a unirse a la Familia Real?
“Está claro que Meghan no quiere regresar al Reino Unido y que tampoco sería bien recibida”, se afirma desde el Mail. Por lo tanto, el regreso del príncipe Harry al seno real implicaría de cierta manera sacrificar su relación con su esposa, alguien a quien no le gustan las malas críticas.
El regreso del príncipe Harry sería calificado por la sociedad como “una admisión condenatoria de que el Megxit ha fracasado” y tal humillación puede impulsar a Meghan a volverse “verdaderamente nuclear”, afirma Maureen Callahan.
“Después de todo, a menudo se presenta [Meghan] como Diana 2.0: una rebelde destinada a rehacer, si no destruir, a la realeza. Ella sabe dónde están enterrados todos los cuerpos y, si la desprecian, podría exhumarlos rápidamente’, sentencia.
Asimismo, la experta asegura que si el duque de Sussex volviera, se comprobaría por completo que los miembros de la Familia Real no son los “monstruos” que Meghan ha afirmado que son.