El escándalo del príncipe Andrés y su ex esposa, Sarah Ferguson, es uno de los más polémicos que ha vivido la historia de la monarquía británica, pues ambos han sido vinculados con el criminal Jeffrey Epstein, lo que ha causado que sean despojados de sus títulos reales.
A pesar de estar separados, Sarah y Andrés compartían el mismo hogar en Royal Lodge de 30 habitaciones; sin embargo, se les ha pedido abandonar la propiedad y buscar nuevas residencias.
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Los nuevos planes de Sarah Ferguson lejos de la realeza y del príncipe Andrés
Más allá de los títulos reales y su residencia en Royal Lodge, Sarah también ha perdido sus empleos en televisión y en las fundaciones que solía apoyar, por lo que ahora tendrá que comenzar una nueva vida alejada de la realeza, y todo índica, que también de Andrés.
Una fuente cercana a la duquesa caída en desgracia, ha revelado sus planes a corto plazo a la revista People: “Ella se va a mudar a una casa aparte”.
“Contrariamente a lo que se ha dicho, nunca ha pedido una propiedad ni ninguna provisión para sí misma”, añade la fuente. “Continuará forjando una vida independiente”.
Otra fuente cercana a Ferguson confirma que ella encontrará su propio lugar y “seguirá adelante de forma independiente”. Una fuente del palacio añade que es improbable que Ferguson se traslade a Sandringham.
Las condiciones que puso el príncipe Andrés para mudarse de Royal Lodge
El diario The Sun informó el 27 de octubre que, a cambio de abandonar el Royal Lodge de 30 habitaciones, Andrew quería dos casas : Frogmore Cottage, la antigua casa de Meghan Markle y el príncipe Harry, para él, y Adelaide Cottage, que el príncipe William y Kate Middleton están a punto de desocupar, para su exesposa, Sarah.
Sin embargo, parece que Sarah ha decidido alejarse finalmente de la realeza y de su esposo, aunque probablemente no de manera definitiva, pues sus hijas, Beatriz y Eugenia de York, conservarán sus títulos reales y el vínculo familiar con la monarquía.