El flequillo a capas se ha convertido en uno de los cortes más rejuvenecedores y versátiles del momento. Pero si tienes más de 50 o 60 años, probablemente te preguntes si realmente te favorece o si podría endurecer tus facciones. La verdad es que este estilo puede ser tu mejor aliado para suavizar líneas de expresión, aportar frescura y darle movimiento al pelo, siempre que elijas la versión adecuada para ti.
Por qué el flequillo a capas rejuvenece
A diferencia del flequillo recto y pesado —que puede marcar demasiado los rasgos—, el flequillo a capas tiene un acabado más ligero y natural, lo que aporta dinamismo y un aire desenfadado. Su caída en mechones suaves actúa como un velo sobre la frente, ayudando a disimular arrugas, iluminar la mirada y dar un efecto más joven y relajado.
Los expertos en pelo coinciden en que este flequillo tiene la capacidad de rejuvenecer sin esfuerzo. Además, al moverse con el viento y adaptarse al rostro, genera un efecto muy favorecedor, incluso si tienes el pelo fino o con menos volumen, algo común después de los 50.
Cómo saber si te queda bien a los 50 o 60
La clave está en analizar tu tipo de rostro y la textura de tu pelo, no todos los flequillos funcionan igual para todas:
- Rostro redondo: elige un flequillo a capas tipo cortina, que se abre al centro. Al dejar ver parte de la frente, estiliza el rostro y lo alarga visualmente.
 - Rostro cuadrado: un flequillo irregular y desfilado suaviza los rasgos angulosos y rompe la simetría.
 - Rostro alargado: opta por un flequillo más abundante y con cuerpo para equilibrar las proporciones.
 - Rostro ovalado: felicidades, puedes usar casi cualquier estilo. Juega con el largo o con mechones sutiles que caigan sobre las cejas.
 
Si tu pelo es muy fino, elige un flequillo con capas ligeras que se fundan con el resto del corte. En cambio, si tienes el pelo rizado u ondulado, lo mejor es adaptarlo a tu textura natural, sin buscar un acabado demasiado pulido.
Cómo mantenerlo con estilo y naturalidad
El mantenimiento es sencillo, pero importante, un pequeño retoque cada seis u ocho semanas ayuda a conservar la forma. Peina tu flequillo con un cepillo redondo y sécalo hacia un lado para darle movimiento. Si quieres un toque más juvenil, aplica un poco de spray texturizador o crema para peinar y deja que caiga de forma natural.
Si aún no te atreves con un flequillo completo, puedes probar con los “curtain bangs”, que se abren al centro y permiten dejar crecer el cabello fácilmente si decides cambiar de look.
El flequillo a capas no solo está de moda: es una forma de reconectar con tu estilo y a los 50 o 60, no se trata de seguir tendencias, sino de elegir lo que te haga sentir cómoda. Así que este tipo de flequillo son ideales porque suaviza el rostro, aporta movimiento y, sobre todo, refleja una actitud auténtica.