Esta semana la Familia Real Británica se dio cita a las celebraciones por el Día de la Victoria en Europa (VE Day), en donde Kate Middleton lució un broche lleno de simbolismo y el cual desentrañan expertos en joyería.
Para la ocasión, que tuvo lugar el pasado 5 de mayor en Londres, la esposa del príncipe William optó por un elegante abrigo color ciruela de Emilia Wickstead, complementado con un sombrero a juego de Sean Barrett y joyería coordinada. Sin embargo, lo que más llamó la atención de su look fue el broche de la Real Fuerza Aérea (RAF) que adornaba su solapa.
¿Cuál es el significado del broche de Kate Middleton?
Este accesorio, según lo que recoge Express de los expertos en diamantes de la tienda británica Steven Stone, no solo sería un tributo a los veteranos de la RAF, sino también un guiño personal de Kate a su difunto abuelo, Peter Middleton, quien sirvió como piloto de la RAF durante la Segunda Guerra Mundial.
Los expertos explican que el broche de la princesa de Gales es un monograma de la RAF “bañado en amarillo dentro de una corona de laurel que simboliza la victoria y el honor” y que las alas que tiene “evocan la trayectoria de vuelo del coraje de su abuelo en tiempos de guerra”.
La elección de este broche en un evento tan emblemático subraya el respeto y la admiración de la futura reina consorte de Inglaterra por aquellos que sirvieron en las fuerzas armadas, así como la conexión que tiene su familia con la historia militar del Reino Unido.
Un hecho muy curioso y poco conocido es que el abuelo de Kate Middleton voló junto al príncipe Felipe en 1962, durante una gira por América Latina. En ese viaje, el esposo de la reina Isabel II elogió sus habilidades como piloto y se dice que ambos compartieron una relación de respeto mutuo.
Por otro lado, durante esta jornada conmemorativa, Kate estuvo acompañada por el príncipe William y sus tres hijos, los príncipes George, Charlotte y Louis, quienes se llevaron los reflectores.
Durante el desfile militar en el Queen Memorial Victoria, los pequeños príncipes dieron de qué hablar por su actitud. Por su lado, el príncipe Louis se mantenía inquieto jugando con el uniforme de su padre William. Mientras que Kate, en el balcón de palacio, acomodaba el cabello de su hija Charlotte. Unos gestos que demuestran que, pese a su estatus de royals, siguen siendo como cualquier otra familia con niños.