Kate Middleton se unió oficialmente a la realeza el 29 de abril de 2011, día de su boda con el príncipe William. Durante esa jornada, la princesa utilizó por primera vez una tiara real y a partir de ese momento no ha lucido más que cuatro tocados brillantes en total, a pesar de que la Familia Real cuenta en su catálogo con más de 10 coronas.
De acuerdo con la revista L’Officiel, la futura reina ha utilizado menos de 5 tiaras en toda su vida debido a que son escasas las ocasiones en las cuales se puede lucir este accesorio, no precisamente porque exista alguna restricción para las princesas.
Por ejemplo, el medio menciona que después de su boda, Kate Middleton tardó dos años en volver a utilizar una tiara. “La tradición dicta que las tiaras no se usan antes de las 6 p.m., aunque las bodas son una excepción”, explicó el experto real Richard Fitzwilliams a la revista Insider, justificando así el hecho de que pocas veces vemos a las royals portando corona.
Además, según la fuente citada, las tiaras solo deben usarse en ocasiones especiales como eventos de etiqueta y banquetes oficiales. “La decisión de usar una tiara depende del código de vestimenta de cada evento y también de las preferencias personales”, agregó Fitzwilliams.
¿Cuáles son las 4 tiaras que ha utilizado Kate Middleton?
Tal y cómo lo mencionamos, desde su adhesión a la realeza, la esposa del príncipe William ha utilizado sólo 4 tiaras:
- La tiara Halo de Cartier, la cual utilizó en su boda con el heredero
- La tiara Flor de Loto, uno de los modelos favoritos de la princesa Margarita, hermana de Isabel II
- La tiara Lover’s Knot, el modelo favorito de la princesa Diana de Gales
- La tiara Rosa Strathmore, la cual le fue obsequiada a la Reina Madre por su padre
¿Cuál es la historia de la tiara Lover’s Knot?
Se dice que la tiara Lover’s Knot es la favorita de Kate Middleton, pues se le ha visto lucirla en más de una ocasión. Esta es su historia:
La delicada corona fue originalmente creada para la reina María de Teck en 1914 por la Casa Garrard a partir de piedras preciosas que ya pertenecían a su familia.
María siguió el modelo del tocado de su abuela, la princesa Augusta de Hesse, la tiara original Cambridge Lover’s Knot, que actualmente se cree que se encuentra en una colección privada desconocida.
Según el joyero de la corte, cuando la reina María encargó la pieza, “sacrificó una tiara de su propia colección de joyas, la Tiara de las Damas de Inglaterra, para hacerla”.
Después de la muerte de la reina María en 1953, la corona pasó a su nieta, la reina Isabel II, pasando a ser también de sus favoritas, pues la longeva monarca llegó a utilizarla en varias ocasiones.