Mientras Meghan Markle continúa con su vida en California junto al príncipe Harry y sus hijos, hay una figura clave de su pasado que permanece completamente alejada de ese núcleo familiar: su propio padre, Thomas Markle, y quien ahora ha iniciado una nueva vida.
¿Qué pasó con el padre de Meghan Markle y dónde vive actualmente?
Hoy, a sus 80 años y en un giro inesperado, Thomas ha dejado su residencia en Rosarito, México, para iniciar una nueva vida en Filipinas, según lo que recoge el periódico británico Mirror.
De hecho, el citado medio publicó fotos exclusivas de Thomas mientras descansaba en el exterior de un supermercado cercano a su nuevo hogar el pasado miércoles 7 de mayo, es decir, un día después del cumpleaños del príncipe Archie.
También, la misma publicación británica señala que el señor Markle ahora vive en un modesto apartamento de alquiler en la isla de Cebu, en Filipinas, por el cual pagaría unas 500 libras al mes.
¿Cómo inició la mala relación de Meghan Markle con su padre?
Por otro lado, la relación de Meghan con su padre se rompió poco antes de su boda con el príncipe Harry, en 2018. En ese entonces, trascendió que Thomas había pactado unas fotos con los paparazzis a cambio de dinero, seguido por problemas de salud que lo obligaron a no asistir al enlace de su hija. Esto marcó el inicio de un distanciamiento que, seis años después, no ha tenido reconciliación.
Desde entonces, la duquesa de Sussex no mantiene contacto alguno con Thomas Markle. Ni llamadas, ni cartas, ni videollamadas. Y, como él mismo ha reclamado públicamente, nunca ha visto en persona a sus nietos, los príncipes Archie y Lilibet.
Incluso, en una entrevista con Good Morning Britain, Thomas expresó su profunda tristeza por no poder conocer a sus nietos, calificando la situación como “un acto cruel hacia un abuelo” .
Además que en una conversación con New Zealand Woman’s Weekly, manifestó su deseo de pasar tiempo con ellos y su preocupación por el hecho de que aún no ha conocido a su yerno, el príncipe Harry, a pesar de la proximidad geográfica, ya que en ese momento todavía no se mudaba a Filipinas.
Así, este nuevo capítulo en la vida del señor Markle parece un intento de empezar de cero, lejos del ruido mediático, pero también lejos de su propia hija. Un caso que es una de las muchas polémicas que rodean a los Sussex y que plantea una pregunta incómoda pero inevitable: ¿habrá redención antes de que sea demasiado tarde? Algo que solo el tiempo podrá responder.